Un trágico accidente ha sacudido Ayacucho: un niño de tan solo 11 años perdió ambas manos al manipular un cohetón conocido como "Mamá Rata". Aunque este artefacto puede parecer inofensivo, su uso terminó llevándolo de emergencia al Hospital de Canaan. Debido a la gravedad de las lesiones, los médicos se vieron obligados a amputarle ambas manos para salvar su vida.
Este lamentable suceso nos recuerda la importancia de ser responsables como padres y cuidadores. Es fundamental estar atentos a lo que compran y usan nuestros hijos, así como evitar adquirir productos pirotécnicos que puedan ponerlos en peligro.
Prevenir tragedias está en nuestras manos. No permitamos que más familias sufran pérdidas irreparables por un descuido. Juntos, hagamos de estas fiestas un tiempo seguro y lleno de alegría.
0 Comentarios