Un terremoto de magnitud 6.8 sacudió la región occidental del Tíbet el 7 de enero de 2025, causando al menos 126 muertos y cerca de 200 heridos.
El sismo tuvo su epicentro en el condado de Tingri, a una profundidad de 10 kilómetros, y se sintió en países vecinos como Nepal y la India. Más de 1,000 viviendas colapsaron, afectando a unas 6,900 personas en un radio de 20 kilómetros. El presidente chino, Xi Jinping, ha ordenado esfuerzos exhaustivos de rescate y ha destinado 100 millones de yuanes para la ayuda humanitaria. Las bajas temperaturas, que pueden descender hasta los -16 grados, complican las labores de rescate. El Monte Everest, ubicado a 85 kilómetros del epicentro, ha sido cerrado temporalmente por seguridad. La región es propensa a terremotos debido a la actividad tectónica entre las placas asiática e india.
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