Las celebraciones por Fiestas Patrias vistieron de rojo y blanco varios puentes emblemáticos de la selva central y nororiental. Desde el CORPAC en Tingo María hasta el Megote en Nuevo Progreso, los símbolos nacionales se desplegaron con orgullo en las estructuras que conectan pueblos y regiones. Sin embargo, la imagen del Puente de Tocache —también presente en el collage patriótico— expone una dura realidad: su deterioro es evidente y representa un riesgo latente.
Mientras los puentes de Tingo María, Uchiza y Nuevo Progreso muestran estructuras sólidas y mantenidas —aunque en el caso del CORPAC también se encuentra deteriorado por antigüedad —, el puente en Tocache luce abandonado. La foto revela su estado crítico: sin mantenimiento, con infraestructura corroída y sometido diariamente a intenso tránsito pesado, sin garantías de seguridad ni control estructural. Los vecinos han advertido que su colapso sería cuestión de tiempo si no se actúa con urgencia.
La postal patriótica, que pretendía unir a los pueblos bajo un solo símbolo, también ha puesto sobre la mesa una desigual realidad en infraestructura. El contraste entre el puente Megote, moderno e imponente, y el de Tocache, envejecido y olvidado, debe servir como llamado de atención para las autoridades. Celebrar la patria también implica proteger la vida de los peruanos que la cruzan todos los días.
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