Gracias a una alerta ciudadana, especialistas lograron rescatar a una anaconda que permanecía en una de las pozas de la Catarata Santa Carmen. El hallazgo llamó la atención debido a que, a diferencia de lo habitual en estos reptiles, el ejemplar no se desplazaba, lo que encendió las alarmas sobre su estado de salud.
Durante la intervención, se constató que el animal presentaba escamas maltratadas, heridas visibles en el hocico y señales de haber estado en cautiverio, posiblemente utilizada para exhibición. Todo indica que fue abandonada o escapó de sus captores.
Actualmente, la anaconda recibe cuidados especializados para su recuperación y posterior reubicación en un hábitat seguro. Las autoridades recordaron que la fauna silvestre no debe ser usada como atractivo turístico y exhortaron a denunciar cualquier caso de cautiverio.
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